
Siento predilección por este plato que puede encontrarse bajo infinidad de nombres. Unos moluscos, cocidos con cariño para sacarlos en su punto, unos brotes verdes y algo untuoso que haga de ligazón. Un plato que ineludiblemente me lleva a recordar una comida para mí memorable.
Supongo que todo amante de la gastronomía, todo foodie, tiene en su subconsciente una mejor comida. Es algo completamente subjetivo, pero que por algún motivo te marca. Para mí, sin lugar a dudas, es comida tuvo lugar en Akelarre, con mis padres y mi hermana, verano de 1.998. Puedo visualizar la llegada, temprano, como gusta mi padre, poco más de las dos, los primeros, ese comedor, esas vistas… Qué trato del mar, del molusco. Recuerdo un plato en cierto modo similar a éste, qué más quisiera, con unos berberechos y unos percebes como protagonistas…
Nunca disfruté tanto, nunca comí mejor, ninguna comida me ha vuelto a marcar tanto, a pesar de ser consciente de que he comido mejor. La mente, el recuerdo, la sorpresa, las circunstancias… Volví no hace mucho, con mi mujer, fue otra cosa…
Lleva trabajo, quizás más de lo asumible en casa para unos pocos platos, pero a mí me merece la pena. Los moluscos, ajoblanco, puré de hinojo, espuma de manzana, guisantes y unos brotes.
Sigue leyendo →
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...